Entrevista a Tomás Martínez

Una vez más, les acercamos una nueva entrevista realizada en nuestro programa de radio Diapasón. En esta ocasión nuestro invitado es Tomás Martínez, colaborador de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.

El programa fue emitido el 19 de mayo de 2015 y para escucharlo sólo tienen que hacer click aquí.

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“A continuación damos paso a nuestra entrevista semanal, en esta ocasión nos acompaña en nuestra sala de invitados un amigo y compañero de TeleYecla, nos referimos a Tomás Martínez, con quien hablaremos de su amistad y colaboración desde hace ya muchos años con la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.

Tomás buenas noches y bienvenidos a Diapasón.

Hola Cecilia, qué tal.

Bueno, es un poquito raro tenerte como invitado en este programa porque formas parte del equipo de redacción de este programa, nos conocemos desde hace mucho tiempo y siempre es especial tenerte aquí como invitado. Vamos a ir hablando un poquito de tu relación con la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, porque tanto profesional como personalmente tienes una gran relación con la Asociación, cuéntanos ¿cómo comenzó esa andadura?

Lo primero felicitarte, es un placer tenerte aquí en TeleYecla Radio, un placer colaborar contigo, ayudarte al principio a montar cabeceras y es este un programa yo creo que necesario, por lo tanto y lo primero, todo el apoyo del mundo.

Muchas gracias.

Bueno, mi relación en este trabajo ocurre pocas veces, ni para bien ni para mal, es así, te relacionas con mucha gente, por la cobertura, los eventos…; las actividades de asociaciones te hacen relacionarte con mucha gente y muy pocas veces pasa lo que a mí me ha pasado con la Asociación de Amigos de la Música.

¿Cómo comienza mi relación? Pues evidentemente a través de mi trabajo en la televisión local, en TeleYecla, lo que pasa que lo que al principio empieza como relación profesional, da la voltereta y se convierte en una cuestión personal. Nace una relación con una gran mayoría de la gente que formáis la Asociación, porque empiezan a haber encuentros y vivo momentos fuera del trabajo.

Y luego hay otro aspecto que yo valoro mucho también en función de la relación que tengo con la Asociación, y es como padre porque mi hijo Abel es alumno, estudia solfeo y piano; espero que continúe porque yo la música no la inculco, la música debe de nacer y ahora mismo mi relación con la Asociación es doble, una como usuario y padre, y la otra personal. Creo que es una relación muy sana, muy maja y que me ha hecho tener buenos amigos aquí dentro.

La verdad es que sí, con Ángel, José Miguel, David Val…has vivido experiencias, viajes y anécdotas como para escribir un libro y supongo que lo recuerdas todo con bastante detalle. Eres también gran conocedor de la música, tanto de otros estilos de música como de “la nuestra” por decirlo así, y estás conociendo y viviendo un poco todo el funcionamiento de la Asociación. ¿Qué opinión tienes de nuestra forma de trabajar, de la Banda, de las actividades que realizamos como por ejemplo el Ciclo “Aula de Conciertos”, el cual conoces muy de cerca, cuál es tu opinión acerca del trabajo y de la música?

Mira a parte de esa unión que hablábamos a mí me nace por lo buena gente que sois, yo me he dedicado casi 20 años al mundo de la música con un comercio, también he sido manager y por ser rápido, luego empiezo a vivir eso con cien músicos, con una banda, y hay muchas cosas paralelas a la hora de compararlo. La verdad es que es impresionante, me explico, yo he estado gestionando contrataciones, prensa…con un grupo reducido, cuando yo he visto de qué manera tenéis que gestionar para asistir a certámenes y demás, mover tal cantidad de gente, en mi opinión es un trabajo de profesionales, y para mí lo sois, porque actuáis y la Asociación se mueve en esos parámetros para gestionar todas esas cosas. Eso sucedió en Italia, hay una tarea organizativa que o se sabe hacer o explota, y yo viví aquella experiencia, no vi una mala cara y artísticamente hablando lo bordáis y os traéis dos premios que han pasado a la historia, y el catálogo tan amplio que tenéis en cuanto a premios conseguidos es admirable. Si generalizo en cuanto a qué aporta la Asociación a Yecla, sinceramente no somos conscientes. En cuanto al Ciclo, nace para dar la posibilidad a alumnos de tocar en público, mucha gente esto no lo puede entender si no está en la música, no es lo mismo estar todo el tiempo en clase aprendiendo a tocar un instrumento que subirte a un escenario, sirve como rodaje y posibilidad para el alumnos, y en trece años que lleváis habéis conseguido que regularmente y me atrevería a decir semanalmente haya música en vivo en la ciudad, dentro de lo que es un formato clásico u otros estilos, y de hecho ahí tenéis una sala llena porque el público responde. Pensábamos que el Casino Primitivo era enorme pero ya se os ha quedado pequeño, por lo tanto ahí hay un bicho dentro, la actividad genera, mueve, promueve actividades, el alumnado sube, viene gente de fuera a matricularse para cursar estudios, no somos conscientes. Aunque hay gente reconoce la labor de la Asociación a lo mejor por hábito o no, por verla desde los años 70, la Banda representa la Asociación y viceversa, pero la monotonía no nos hace ver la importante labor cultural que desarrolla la Asociación porque para mí chapó, porque encima para mí la música no es cualquier cosa, y no todas las ciudades tienen la posibilidad de, cómo en mi caso, acercar a un niño para que se forme sin llevarlo fuera a un conservatorio, una primera relación y un primer contacto. Y sé que no os vais a quedar ahí, sé que tenéis muchas ideas, sois gente inquieta y es necesaria la Asociación, yo Yecla no la entendería si no estuvieseis ahí.

Aprovechando que te tenemos hoy aquí vamos a hablar y recordar algunas anécdotas y principales experiencias, por destacar algunas porque hay muchas. Siempre hemos colaborado montando vídeos, por ejemplo en la Gala Enoturista, en todo el proyecto de El Greco, en Santa Cecilia…, pero podemos destacar o quedarnos con dos grandes momentos, el viaje a Riva del Garda y hace unos meses el Alcázar de Toledo.

Vamos a hablar un poco de todo esto, por un lado destacar la gran labor de cobertura, el gran trabajo que hicisteis David Val y tú en Italia porque fuisteis capaces de volcar esa gran noticia y esa información al minuto, suponiendo un vuelco y una repercusión en el pueblo. Fue llegar, recuerdo que era Jueves Santos y cuando la Banda salió, tocó la primera marcha en la procesión y la gente aplaudía, de hecho estuvo aplaudiendo durante todo el recorrido, yo lloré y muchos de mis compañeros también, y eso se debe más que nada a que la gente ya estaba informada, sabía lo que había pasado y eso lo lograsteis vosotros. ¿Cómo recuerdas todo aquello?

Bueno primero un abrazo enorme a David Val, pasamos seis días geniales, trabajando, no teníamos internet, nos buscamos la vida. Pero tengo que dejar una cosa clara los periodistas si no ocurren cosas no somos nadie, y la culpa de todo eso la teníais vosotros, nuestra labor era contarlo. Y claro, evidentemente eso se contagia, David además de periodista es músico de la Banda, y cuando dieron el nombre de la Asociación y de Ángel yo también lloré porque la emoción te podía en ese aspecto.

Yo creo que ahí hubo un antes y un después, yo sé que la Asociación hizo un esfuerzo grandísimo en materia económica y de organización, y al final se hizo justicia por el talento que tenéis y se valoró. Evidentemente vuelves a Yecla y la sociedad reacciona, a partir de ahí piensas qué ha hecho esta gente en Italia, pues verdaderamente creo que era justo y ese recibimiento pues también.

Qué valoro, pues Riva del Garda, impresionante, el mundo artístico, la inspiración en aquellos paisajes, la profesionalidad porque son seis días que vas de alguna forma a vivir cosas muy chulas, y la noche de antes allí no salía nadie del hotel, la profesionalidad absoluta, al otro día tembló Riva está claro pero ya habíais cumplido vuestro cometido. Por otro lado Venecia fue un momento especial, porque todos paseábamos con la sensación de los premios en el bolsillo, una despedida fantástica de ese momento. Yo volví con mi familia a Venecia y os veía por todos los rincones, siempre estará ligada esa ciudad a ese momento.

Y de Toledo, pues me empieza a impresionar cuando me siento con Ángel, me pide una vez más que elabore los vídeos que se proyectaron en la interpretación de la obra y son cosas que quedan ahí y a lo mejor no se perciben, pero yo me siento con Ángel y me hace recoger todos los planos concretos que él quiere o son necesarios para ponerle imagen a la música. Todo está medido, eso ya explica todo lo que después pasó, la sensación de que las cosas se hacen bien, la percepción con el público fue impresionante, tocar en el Alcázar, un sitio con tanta historia y vivirlo por dentro; otra vez fue un momento mágico, y eso pasa cuando acompañas a la banda, las grabaciones están muy bien pero el momento mágico fue allí, el escenario mejor imposible, El Greco fantástico… pero han habido más, me fui con vosotros a Tarragona, en Dosbarrios no me fui pero os seguí online al minuto y muchas veces no me voy porque no tengo tiempo por el trabajo, pero estoy teniendo la suerte de vivirlas junto a vosotros.

Pues la verdad es que es una suerte, también hay que destacar toda vuestra labor porque en el pueblo cualquier trabajo de cualquier asociación si no se difunde a través de los medios de comunicación no iríamos a ninguna parte y se agradece por supuesto que sí.

Bueno Tomás tengo que darte las gracias en mi nombre por todo lo que has comentado tú, lo que me has enseñado y ayudado, y también en nombre de la Asociación de Amigos de la Música porque siempre nos ayudas. Ha sido una gran alegría tenerte aquí con nosotros, que  todos estos años hayas estado ahí, y esperamos que sigas viniéndote con nosotros y acompañándonos y pasando buenos ratos. Para ir despidiéndonos te voy a pedir como a todos nuestros invitados una recomendación musical para despedirnos con música.

Bueno dos cosas, los medios de comunicación tenemos la obligación de atender más la cultura, es una carencia, TeleYecla evidentemente acude a las exposiciones, conferencias… estáis con nosotros porque El Templete ya existía, yo comencé aquí colaborando con El Templete, y los medios tenemos esa carencia, mucha política. La cultura es muy importante y hay que contárselo a la gente porque se hacen muchas cosas en poesía, pintura, música… yo me he dado cuenta que un informativo se cierra con treinta segundos de un concierto una vez al mes, no es justo esa proporción, hay muy pocos programas de música, muy mal en ese aspecto.

Y me pedías una recomendación, es complicado, una vez me preguntaron ¿por qué no haces música? y siempre he respondido lo mismo, mientras me encuentre satisfecho con la música que hacen los demás a mí me llena, la pereza te puede y no te animas a aprender a tocar y a aprender música. Te vas dando cuenta que no hay música buena o mala, simplemente música que te gusta más o menos, o que conectas más o menos. Entonces es muy complicado pero me voy a mojar, yo soy muy clásico aunque yo he tenido un comercio en música independiente. Mira en el mundo del pop yo conozco una canción que conoce todo el planeta y la voy a recomendar porque sigue estando vigente, por su mensaje y simpleza, tiene un potencial increíble, la demanda social a través de esa canción es mucho más potente que un montón de políticos subidos en un atril diciendo que nos van a mejorar la vida,  y te estoy hablando de Imagine de John Lennon. Sigue siendo una canción vigente, pero yo me pongo en el lugar del artista y menuda mala leche tiene que tener por dentro o la inquietud a la hora de componer esa canción, fantástico, es un clásico y para mí tiene un potencial increíble, es un ejemplo de una canción sencilla y un mensaje y una fuerza impresionante.

Y luego yo no soy un especialista, pero a la vez que coleccionaba pop compré una colección clásica y hay un disco que he escuchado muchas veces, y me impresiona mucho, es el Requiem de Mozart, y no soy especialista, pero creo que hace falta cierta locura para que un artista llegue a sacar la esencia de lo que es la creación, porque la música es creación también, y me emociona mucho con el Requiem de Mozart. Cómo trata el aspecto fúnebre, la obra con más tristeza que más se alegra.

Y ya está, porque podría seguir con el Jazz, con el Pop…la música me quita cabreos y la música tiene su momento, yo a veces me quito cabreos poniéndome un disco y sí que recomiendo a todo el mundo que en su vida diaria se acerque a la música, a veces es mejor que un Gelocatil, que la escuche y le haga disfrutar, que encuentre una conexión con eso que está escuchando.

Por supuesto que sí, estoy totalmente de acuerdo contigo, y tu decías aunque no soy músico conozco y se nota que lo vives, por lo tanto son dos grandes ejemplos de dos grandes piezas que a continuación sonarán. Pues bien Tomás, muchísimas gracias por habernos acompañado aquí en Diapasón, es la primera vez que nos acompañas como invitado y estoy muy contenta, muchísimas gracias por todo y nos vemos pronto.

Muchas gracias por invitarme y perdona pero los que trabajamos hablando al final somos Cotorrico Pérez (risas). Un placer estar aquí y no te vayas, tienes que estar aquí mucho tiempo, Diapasón es necesario, se lo digo a la gente, yo estuve haciendo programas de radio doce años, y lo que tú estás viviendo yo lo viví, programaba todo con mucho cariño e ilusión, entonces los programas especializados como el tuyo se preparan con muchísimo cariño. Ha sido un placer y espero que no sea la última vez que vuelva aquí a Diapasón.

Yo tampoco, espero que vuelvas pronto. Intentaremos continuar nuestra labor dentro de nuestras posibilidades y sí, lleva trabajo, lo hacemos con ilusión y me hace mucha gracia el número de programas porque llevamos más de cien y parece que fue ayer cuando me explicabas qué partes, cómo se montaba… y fíjate, por lo tanto muchísimas gracias.

Muchísimas gracias Cecilia, tú eres músico y todo lo que hemos hablado lo conoces perfectamente pero aparte estás haciendo una labor muy importante difundiendo la música a través de un programa de música. No te canses nunca Cecilia. Un beso.

Gracias Tomás.”

Cecilia Ortuño Gil.

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