Los orígenes de la música procesional se encuentran en las marchas fúnebres comenzándose a usar ya en la segunda mitad del S.XX. Una de las más usadas y conocidas es la “Marcha Fúnebre de Chopin.
Con el uso de estas, habrá una necesidad de escribir también obras nuevas, en este caso marchas fúnebres, que estarán dedicadas a Hermandades y Cofradías concretas, para ampliar el repertorio. Uno de los primeros en hacerlo fue José Gabaldá Bel, Director de la Banda de la Guardia Real de Madrid, que compuso obras como “El Llanto” y “Soledad”. También podemos hacer mención al cordobés Rafael Cebreros y al gaditano Eduardo López Juarranz, como primeros compositores del estilo.
Pero tenemos que hablar de algo que revolucionó el panorama musical y a través del cual empezó a cambiar todo. Nos retomamos al año 1925, donde el maestro López Farfán hace algo muy novedoso, une a la banda de cornetas y tambores y a la banda de música, y hace una marcha con cornetas a la que llamó “Estrella Sublime” la cual supuso un gran cambio en la música procesional. Tenemos que tener en cuenta, que este cambio fue más profundo en Andalucía pues, en toda España las formaciones que he mencionado, cada una de estas está destinada a su labor musical.
Otro de los grandes compositores es Abel Moreno. Este Teniente Coronel también puso su sello y revolucionó al mundo del costalero con la marcha “Hermanos Costaleros”. Esta obra tiene la peculiaridad de que facilita al costalero la forma de mover el paso, y sin introducir cornetas en la obra, lo que ayudó a su mayor difusión. Cabe destacar de este compositor su ilustre marcha “La Madrugá”, marcha que describe mediante melodías que simbolizan cada una de las hermandades de la “Madrugá” de Sevilla.
No podemos dejar de mencionar también a otros grandes que han dado mucho a la música procesional como la familia Font, Germán Álvarez Beigbeder, Emilio Cebrián, Gámez Laserna o Pedro Braña, entre otros.
La evolución de la música procesional ha dado una variedad de estilos en cuanto a formaciones se refiere. El propio músico ya necesita de una formación específica con la necesidad de estudiar en escuelas de música e incluso en el propio conservatorio, para poder defenderse ante una partitura.
A partir del estilo de la Banda de la Guardia Civil de Eritaña, es cuando surge el denominado estilo de “Agrupación Musical” cuyo precursor fue Manuel Rodríguez Ruíz, con su Agrupación Musical Santa María Magdalena de Arahal (Sevilla), madre y maestra de todas las agrupaciones actuales. En cuanto al estilo de “Cornetas y Tambores”, estas no surgieron para acompañar procesiones y son de origen marcial, su diferencia con respecto a la agrupación musical, es el único uso de cornetas y tambores, aunque en la actualidad y respondiendo a la evolución de la música procesional, esta formación ya cuenta con un gran número de instrumentos como la tuba, por ejemplo. Una de las más reconocidas bandas de este estilo es la “Banda de Cornetas y Tambores de Las Cigarreras”.
El origen del estilo de “Banda de Música” viene del mundo militar. Esta se compone de instrumentos en viento-madera y metal junto con percusión. La diferencia con las anteriores es su gran abanico en instrumentos.
También existe un estilo más concreto que es el de “Música de Capilla”. Esta formación solo consta de tres o cuatro músicos que tocan instrumentos como el clarinete, el oboe y el fagot.
Fue una de las primeras formaciones en incorporarse a los desfiles de semana santa. Crean un ambiente fúnebre, de silencio, y acompañan a las hermandades más ascéticas de Sevilla.
No quisiera terminar sin hablaros de un hecho que ocurrió con el ilustre compositor ruso Igor Stravinsky.
En el año 1921, Stravinsky se encontraba en Sevilla ,junto con el coreógrafo Diaghilev, en plena Semana Santa, y al ver pasar el paso de la Virgen del Refugio por la Puerta de la Carne mientras sonaba la marcha “Soleá, dame la mano” dijo; “Estoy escuchando lo que veo y viendo lo que escucho”. He aquí la gran importancia de la música no solo en Semana Santa, sino en nuestra propia vida.
Roberto Puche,
Abril 2015