El pasado sábado 19 de noviembre tres miembros de la Banda de la AAMY tuvimos el placer de coordinar y realizar un taller de música en un marco diferente al habitual: la Sierra Salinas. Los destinatarios del mismo fueron los chicos y chicas de la Asociación No Hay Límite de Yecla. Tanto Rocío Palao, como Roberto Puche y yo, aceptamos con gusto llevar a cabo dicho taller porque pensamos que era una bonita ocasión para dedicarnos a mostrar lo que los músicos podemos hacer y, por supuesto y lo más importante, para disfrutar y colaborar con dicha asociación y cada uno de sus integrantes –siempre muy dispuestos a aprender con una gran ilusión y una sonrisa de oreja a oreja–.
De esta manera, desde las 11 H hasta las 14 H pudimos realizar las actividades que habíamos programado previamente: mostrar la amplitud de instrumentos de percusión con los que contamos y hacerlos sonar, tocar piezas musicales conocidas con un teclado eléctrico acompañadas de batería y pequeña percusión, enseñar los ritmos de pasodoble, de vals, de marchas moras y cristianas -entre otros-, mostrar que también se puede realizar percusión con nuestro cuerpo (percusión corporal) y, por último, realizar una gran batucada. En todo momento los participantes estuvieron activos participando en cada una de las actividades, disfrutando muchísimo y, sobre todo, aprendiendo cosas completamente nuevas para ellos.
Pero, sin duda, el colofón del taller fue montar la mencionada batucada. Cada uno realizaba el ritmo que le era encomendado con los diferentes instrumentos de percusión y así conseguimos entre todos que el resultado fuera espectacular. Finalmente y como muestra de nuestro trabajo, les enseñamos a los chicos de otros talleres estos ritmos y no dudaron en aplaudirnos entusiasmadamente y en bailar, reconociendo la labor que todos habíamos realizado esa mañana. El objetivo de trabajar en colectividad, disfrutar y aprender nociones musicales básicas había sido cumplido.
José Luis Palao Azorín.