En esta ocasión recordamos la entrevista realizada el 5 de octubre del pasado año 2021, en el programa Diapasón. En su edición nº 346 hablamos con Efigenia Sánchez, como antigua Presidenta de la AAM de Yecla y alumna de la Escuela de Música de nuestra ciudad.
P: Esta semana en Diapasón echamos la vista atrás para hablar de recuerdos y de muchos años de la historia de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla. Para ello, nos acompaña Efigenia Sánchez Ibáñez.
Efi, buenas noches y bienvenida a Diapasón.
R: Muchas gracias. Buenas noches, gracias por invitarme.
P: Vamos a comenzar hablando un poquito de ti y de tu relación con la música: pasaste por la directiva, y también eres alumna de la escuela mucho tiempo… ¿Qué significa la música para ti y cómo llegó la música a tu vida?
R: Bueno, la música siempre ha estado en mi vida desde que yo era una cría. De hecho, yo empecé mis estudios musicales estudiando en Francia, porque estuvimos una temporada allí, y lo dejé un poco estar hasta que mi hijo entró a la banda. Él empezó en la Escuela del Reloj con cuatro años y ya me enganché. Después entró a la banda y, como empezó a viajar, pues lo que somos las madres, pues yo me voy, me voy, me voy… hasta que me dijeron: “¿Quieres entrar en la directiva?” y allí que nos apuntamos.
P: Primero como vicesecretaria, después llegó la etapa de presidenta entre 2004 y 2008, luego continuaste también como tesorera. ¿Cómo recuerdas toda aquella época?
R: Bueno, recuerdo que me liaron, porque el presidente anterior, Pepe Saurín, no se presentó a la reelección y entonces empezaron a decir “venga, apúntate”, “venga, te nombramos” y me “engañaron…” Pero la verdad es que me dejé engañar… Estaba muy vinculada entonces, salía muchísimo, siempre que podía por mi trabajo, me desplazaba con la banda. Creo que salía más que ellos a los moros y cristianos, me los conozco todos… y así empezó todo… Me presenté al cargo, salí elegida, porque creo que no se presentó nadie más, y nada, pues aportando el grano de arena que pudimos. De todas formas, yo lo dije siendo presidenta, y lo vuelvo a repetir ahora, que el presidente es una persona que tiene que figurar ahí, pero que realmente el trabajo es un equipo de personas que, desinteresadamente, van colaborando con esa labor. Presidente podía haber sido quien sea, es decir, que cualquier persona puede ejercer, pero lo que realmente vale es el equipo que hay alrededor de la persona física como presidente.
P: La Asociación es una entidad muy viva que no para de hacer proyectos, no para de ampliar fronteras, horizontes… Y también en tu etapa como presidenta se comenzaron a llevar a cabo proyectos, por nombrar alguno, la colección Aires de Yecla que ha perdurado en el tiempo. Te voy a preguntar ahora por recuerdos, por anécdotas, por momentos que a ti te marcaron acompañando a la banda y, dentro de la Asociación en general.
R: ¡Hay muchos, muchísimos! Sí, dentro de mi etapa de presidenta se empezó con los Aires de Yecla. Costó, porque nadie se imagina lo que hay detrás de cada nuevo proyecto (supongo que ahora a los que están les pasa exactamente lo mismo), aparte de los tropiezos siempre de papeleo, de ayudas… Cuesta todo muchísimo. Además, el hecho de preparar un concierto, por ejemplo, la gente va “ay, qué guay, cómo ha quedado esto”, pero no sabe el gran trabajo que va de ensayos, de preparación, de traslado de instrumentos… Es tremendo, eso hay que vivirlo para saber realmente lo que cuesta.
Recuerdos tengo muchísimos, pero el que creo que no se me olvidará nunca fue el viaje a Italia, el certamen de Riva d’Garda. Aquello fue impresionante, el ambiente, la gente que nos acompañó… Que eso era impensable… No sé si éramos doscientas y pico personas para mover eso por Italia, en el aeropuerto, hotel… Bueno, tremendo. Y lo bien que lo pasamos y el recuerdo que nos dejó la banda y cómo lo hicisteis. Impresionante.
Después, seguía yo en la directiva todavía, el viaje a Holanda. Eso fue… El ser campeones del mundo, la ilusión con la que vivimos aquello, la labor de la banda, que estuvo espectacular, cómo se portó el personal, cómo lo pasamos… Si es que es mucho, estaríamos aquí toda la noche porque recuerdos tengo un montón.
Y recuerdo también, a pesar de ya no estar en la directiva, salidas con la banda, conciertos a Murcia, al Auditorio, he ido a todo lo que he podido, porque la música realmente es mi vida.
P: Si hablamos de la labor social, educativa y cultural que desarrolla la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, ¿qué balance harías sobre la evolución que ha llevado a cabo la Asociación a lo largo de todos estos años?
R: Bueno, pues, como he comentado antes, la evolución la empecé a vivir cuando la Escuela estaba en la torre del reloj de la plaza, que fue cuando yo empecé a llevar a mi hijo a percusión (que ya era un nano y ya tocaba). Posteriormente, recuerdo que hubo un tiempo que se tuvieron que repartir los alumnos, unos en la calle Colón, otros iban a la calle Zaplana…, porque no había dónde estar y el Hospitalico todavía no estaba acondicionado para que pudiéramos entrar allí.
La época del Hospitalico, cuando se entró, ¡madre mía, qué escuela!… Y a los cuatro días se quedó pequeña… pero es que luego viví también la transición del Hospitalico al edificio actual del Casino Primitivo, que recuerdo que cuando vimos la primera vez los planos dije: ¡Madre mía, qué escuela allí!, ¡Madre mía, verás tú!…
Y otra vez pasó exactamente lo mismo. Es incomprensible que el edificio se haya quedado pequeño, que la cantidad de alumnos va creciendo, pero es que yo recuerdo que en el Hospitalico iba algún que otro adulto, eran sobre todo niños en edades escolares, alguno que iba al instituto que ya empezaban con la banda, pero es que ahora casi, casi somos más adultos… Es decir, ya estamos casi igualados los mayores a los niños. Y eso no tiene precio.
Indudablemente se ha quedado pequeño, pero es que esto yo no sé si va a tener techo y va a parar de crecer algún día, porque la verdad es que es impresionante la labor que está realizando la Escuela, la Asociación de Amigos de la Música y toda la gente que está involucrada. Y luego también la respuesta en general de Yecla, del público… Yo recuerdo, además en una de las primeras entrevistas que me hicieron como presidenta lo nombré: Dije que me daba mucha pena que cuando la banda de Yecla pasaba, se oía el comentario generalizado de “vámonos que ya viene la música…” A mí me daba muchísima pena oír ese comentario y ahora la verdad es que en cualquier acto es al revés: “venga, que viene la música, vámonos detrás que da gusto oírlos…”
Y es que hemos ganado en todo, la labor se ha ido ampliando de una manera impresionante. Me encanta que se reconozca a la banda por la calle, que se reconozca en el teatro, que se llene y que falten entradas. Es algo que me encanta y debería de ser cada día más.
P: Es una alegría ver ese crecimiento, esa constancia y ese esfuerzo. Pues bien, Efi, hemos pasado un ratito repasando momentos, recuerdos, proyectos y hablando de música. Para terminar, te voy a pedir alguna recomendación musical u obra favorita. ¿Qué te gustaría compartir con nosotros?
R: Tengo varias porque, como ya he comentado, la música forma parte de mi vida en muchísimos momentos buenos y no tan buenos; especialmente, en los no tan buenos me ha ayudado muchísimo, y la gente que me conoce sabe que los he tenido. Pero me quedo, por supuesto, con Churumbelerías, ¿a quién no le gusta? (risas) pero también hay una obra que recuerdo, que además fue la primera vez que mi hijo tocó en el Teatro Romea en Murcia, que no fue del agrado de todo el mundo, me consta también, pero a mí me encantó.
No recuerdo muy bien el autor, sé que la obra se llamaba Dredred. Es una obra complicada, pero que a mí me gusta mucho y siempre que puedo indudablemente me la pongo.
P: Estamos hablando de una grandísima obra, Dredred, del compositor valenciano Andrés Valero Castell, con un lenguaje muy contemporáneo en aquella época y de un gran nivel para banda, y que los músicos yeclanos interpretados en el Certamen de Murcia, además de estar incluida en el primer volumen de la colección Aires de Yecla. A continuación, sonará. Muchas gracias Efi, por acompañarnos y a seguir disfrutando de la música, hasta pronto.
R: A vuestra disposición cuando me necesitéis, gracias.
Cecilia O.
Colaboradora AAMY.