Queridos lectores, me alegra mucho iniciar y compartir este proyecto con la Revista Diapasón de la AAM de Yecla. El tema escogido para esta sección es sin duda un tema amplio, difícil y muy fascinante: el piano en la música contemporánea. Han sido varias las razones que me han empujado a escribir sobre este asunto en concreto, del cual no me siento en absoluto una especialista. Me resulta interesante hablar sobre un tema del que nos dan información tan deficiente incluso en estudios Superiores de música, y que puede convertirse en un campo de investigación fascinante. Es maravilloso conocer nuevas músicas y compartirlo. Pero antes de nada, por lo complejo del asunto y la variedad de enfoques y planteamientos que se le puede dar, aclararé mi propósito y los conceptos sobre los que me voy a fundamentar.
En primer lugar, definir el concepto de “música contemporánea”. Como tal, la contemporánea se debería referir a toda la producción musical que se está creando hoy en día: la música actual. Perteneciente a este mismo año, a los últimos cinco o diez años o desde comienzos de nuestro siglo, es una cuestión que debe aclararse al hablar de ello. Debido a que el término “contemporáneo” no obedece a ningún estilo o estética artística en concreto, como ocurre tradicionalmente con la música Barroca o Romántica, sino al momento en el que se ha creado esa música, hay grandes dificultades a la hora de definir cronológicamente la música contemporánea.
Para muchos, la música contemporánea engloba la producción creada desde la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días, a partir de 1950 -aproximadamente- hasta lo que llevamos de siglo XXI. Esto le añade complejidad a la problemática de qué periodo engloba.
No sólo es difícil el cuándo sino el qué. Para todos aquellos que engloban la contemporánea en una música nacida hace más de 50 años, también se refieren a un tipo concreto de música en cuanto a estilo. Se trata de un compendio de estilos muy diversos, evolución de la música académica o clásica, que suele caracterizarse por un lenguaje atonal y vanguardista, más o menos “novedoso”. Aunque no pretendo hablar demasiado sobre ello, sería interesante concretar cuándo nació esta denominación que ya forma parte de la idea preconcebida de muchos músicos e interesados en la contemporánea.
Sin embargo, en cuestiones generales se suele utilizar “música contemporánea” para denominar a la música académica y vanguardista –o al menos, inspirada en las tendencias vanguardistas recientes con un lenguaje mayormente atonal- desde finales de la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días; y asimismo también suele referirse simplemente a la música académica escrita en lo que llevamos de nuestro siglo.
Creo en la importancia de ser exigentes y concretos con el cómo y el porqué de muchas “etiquetas” que sufre esta música. Me gustaría defenderla frente a los clichés generalizados que sufre por parte de mucha gente hoy en día: es una música compleja, difícil de escuchar, de entender y de disfrutar. Estas valoraciones suelen nacer, como todos los prejuicios, de una falta de interés e información. El recorrido que intentaré trazar en esta sección puede ayudar a descubrir o afirmar sus mayores cualidades, ventajas inherentes a la música contemporánea: goza de una variedad de estilos sin precedentes y refleja características de nuestra sociedad, pensamiento y cultura actuales.
Para reducir y concretar el contenido de la sección, me centraré en mi especialidad, el piano. La protagonizarán compositores de música contemporánea para piano, sus obras, y la labor de grandes pianistas especializados y dedicados a la interpretación y divulgación de esta música.
En cuanto al periodo, englobaré la música contemporánea como la creación musical tras la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días. Aunque creo que es más correcto denominar “contemporánea” a las obras de nuestro siglo, en este caso puede ser útil remontarse algo atrás ya que desde entonces hay mucha música desconocida para muchos músicos.
Escogeré obras, compositores o intérpretes que sean –según mi criterio- de especial interés por su calidad artística y su repercusión, intentando abarcar a grandes trazos cuestiones muy diversas, con una finalidad claramente divulgativa.
Hace unos meses, mi compañero de dúo de piano Francisco Martí y yo, tuvimos la oportunidad de comprobar lo complicado que puede llegar a ser encontrar información, grabaciones o partituras de la música contemporánea menos comercial. Además, vivimos una anécdota con el pianista británico Mark Knoop, especialista en contemporánea. Tras dar una clase con él, le preguntamos ávidos de información si conocía alguna web donde pudiéramos conseguir grabaciones o partituras de este tipo fácilmente. Nos sorprendió bastante su respuesta: recomendó Facebook como la vía más rápida para conseguir información de composiciones actuales, contactando directamente con ellos. Y esto no es más que una prueba de lo complicado que puede resultar encontrar material, en comparación con otras músicas más comerciales, y lo necesario que es un ejercicio de divulgación por parte de la gente dedicada a ello.
Por lo tanto, para concluir la introducción a dicha sección, facilitaré enlaces a páginas web que personalmente me están ayudando a descubrir el amplio mundo de la contemporánea, algunas centradas en la producción pianística y otras no, y que pueden ser de ayuda para cualquier interesado en conocerla y escucharla. Espero que lo disfruten.
https://contemporarypianovideolibrary.wordpress.com
Página web de Ricardo Descalzo, actual pianista español especializado en música contemporánea con un maravilloso proyecto de divulgación de la música actual (especialmente la del siglo XXI).
http://swappano.com
http://sheeto.com
http://pianofiles.com
Portales para contactar con personas que suben a internet partituras. Son muy recomendables para encontrar algunas de música contemporánea que pueden ser difíciles de encontrar.
Canales de Youtube: incipitsify y NewMusicXX Estos canales de youtube han sido creados para difundir música del siglo XX poco conocida y creaciones contemporáneas, algunas de ellas pueden escucharse con la partitura.
Carolina Santiago Martínez